Cuando una persona piensa en tratamientos y estrategias cosméticas, compuestas por varios elementos, usualmente tiene en mente terapias, cirugías y otros procedimientos. La idea de que algo tan simple como una mascarilla facial, pueda hacer muchas cosas a la vez, resulta algo fuera de lo que parece común.
El hecho de que existan un sinfín de recetas, fórmulas y composiciones diferentes es una cosa, pero combinarlas y aplicarlas a la vez parece algo muy contraproducente. Sin embargo, una de las afirmaciones de la medicina estética es que un rostro, a pesar de ser un todo, en realidad se compone de distintas partes.
Esto no se requiere a los ajos, la boca, la nariz y demás, sino a diferentes zonas de piel, que poseen características muy variadas, por lo que se deben tratar con diferencia. Aunque resulta algo bastante complicado, ya que para hacerlo, hace falta conocer a fondo cuáles son esas variaciones de las que hablamos.
Todo esto se entiende al recurrir a una técnica de tratamiento facial algo desconocida, pero que en muchos lugares es increíblemente popular, gracias a su estrategia. La innovación estética no solo requiere de tecnología y procedimientos, sino de métodos sencillos llevados al siguiente nivel, como se explica en Todo sobre las mascarillas de tipo peel off
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La idea conocida como multimasking
Si bien el nombre puede parecer confuso, quienes tienen una noción básica del idioma ingles pueden comprender un poco que, como concepto, se entiende al mencionarlo. Multi, el comienzo de esta palabra compuesta, hace referencia a diferentes cosas, o distintas partes de algo más amplio.
Por otro lado, la palabra masking se refiere a las mascarillas, en este caso, a los tratamientos en crema, gel, espuma y otra textura, aplicados en el rostro para cuidarlo. Las mascarillas faciales son parte de la cosmética desde hace siglos, incluso desde que este estudio fuese considerado una ciencia en sí misma.
En otras palabras, multimasking quiere decir utilizar diferentes mascarillas al mismo tiempo, pero siguiendo un lineamiento y una serie de instrucciones para que funcione. No se trata de tomar diferentes productos y combinarlos, ya que esto solo logrará saturar el tejido, por lo que no se aprovecharán sus activos.
Por eso hablamos antes sobre las diferentes zonas del rostro, en cuanto a la dermis del cutis se refiere, ya que este punto es que se relaciona directamente con la técnica. Un ejemplo claro es el cutis mixto, que posee características grasas en la zona T (frente, tabique y nariz), mientras que es seco en el resto de la superficie.
La aplicación de la estrategia ganadora
Una de las recomendaciones o consejos más comunes, al momento de hablar de un producto facial, es el hecho de que se debe aplicar correctamente para aprovechar sus beneficios. Este suele ser un tema recurrente en la comunidad cosmética, por lo que es común mencionarlo, tal como se hace en este artículo sobre Cómo usar una mascarilla facial
En el caso del multimasking todo cambia, ya que las reglas de aplicación son muy diferentes, pues requiere de reconoce las distintas necesidades de la piel del rostro. Es fácil en el caso de un cutis tipo mixto, pero según muchos especialistas, incluso se pueden ver diferencias aunque sea en otro tipo de dermis.
En otras palabras, una persona con piel seca puede tener zonas propensas a las arrugas, otras afectadas por las manchas y algunas con mayor grado de resequedad. La mejor forma de comprender esto es recurrir a un experto, dermatólogo o cosmetólogo, que analice, estudie y de respuestas sobre este tema.
Luego de haber reconocido las áreas a tratar, la aplicación es similar a la de cualquier otra mascarilla, pero delimitando el área al punto exacto donde se requiere. Si las mejillas y pómulos tienen algunas manchas, se aplica un producto despigmentante, pero solo en esas zonas mencionadas.
Después de esto, si se sufre de patas de gallo y arrugas en el entrecejo, entonces la mascarilla a utilizar allí será una antiarrugas, dejando el resto sin cubrir. Del mismo modo, se recurre a un hidratante para otro punto, que puede ser por ejemplo el mentón, en el que hace falta utilizar alguna de estas Recetas caseras de mascarilla hidratante
Beneficios de esta técnica
Hay que recordar que no se trata de instrucciones específicas, ya que tanto el área de aplicación como el producto escogido dependen de los requisitos. Con tantas necesidades que se deben suplir en la dermis, las combinaciones son prácticamente infinitas, ya que se basan en la individualidad de cada rostro.
Este es el principal beneficio de recurrir a la doble aplicación, como se conoce en muchas comunidades, pues lo más común es realizar el multimasking con dos sustancias. Sin embargo, no hace falta limitarse de este modo, ya que en muchos establecimientos estéticos se realiza la aplicación de múltiples activos.
Activos y propiedades útiles para cada zona del cutis
Si bien se acaban de mencionar la infinidad de posibles combinaciones, existen recetas y productos basados en esta estrategia, que ya vienen preestablecidos. La idea de su diseño es brindar al público una amplia gama de opciones y oportunidades de cuidar del rostro, bajo ciertos parámetros generales.
Por otro lado, este apartado también puede aportar cierta claridad, ya que al comprender un poco más sobre las propiedades a utilizar, se puede saber cómo hacerlo. No hay que ser un experto para saber que, si una imperfección ataca un área del cutis, es porque es vulnerable, por lo que se requiere saber Cómo elegir la mejor mascarilla facial según tu tipo de piel
Para cuidar la piel mixta
Lo que diferencia este tipo del resto, es que posee dos grandes zonas con variaciones que, por sus características, son directamente contrarias y requieren tratamientos opuestos. Mientras que la ya mencionada zona T es tipo grasa, por lo que produce más sebo, el resto es tipo seca, sufriendo de resequedad.
La oposición viene del hecho de que, para eliminar el sebo hacen falta agentes limpiadores, que pueden afectar de forma negativa al área seca por su sensibilidad. Así mismo, esta última necesita de un mayor nivel de humectación, algo que exacerbar la secreción sebácea de la zona T grasa.
La solución a este dilema son los productos de Multimaskin para dermis mixta, que contienen dos sustancias diferentes, diseñadas para ser aplicadas en cada área. También existen máscaras faciales, cuya forma es la misma del rostro, para colocarse fácilmente y aprovechar todos sus activos.
Para reducir las imperfecciones
Este punto es mucho más simple, pero vale la pena mencionarlo, ya que muchas personas suponen que con solo suplir las necesidades básicas debe ser suficiente. Si algún área específica sufre de una marca de la edad en particular, entonces se requiere de una mascarilla ideal para la misma.
Las imperfecciones más comunes suelen ser las arrugas, pero la lista en realidad es muy amplia, ya que hay otras, como los comedones, manchas, flacidez y más. Para escoger una sustancia cosmética hay que saber cuál es el problema que debemos solucionar, por ejemplo, para las manchas se requieren Las mejores recetas de mascarilla facial iluminadora
Los llamados productos antimanchas o despigmentantes también sin para las manchas, así como los antiarrugas funcionan para las líneas de expresión y surcos. Para la flacidez, lo mejor son los reafirmantes, mientras que en el caso de los comedones, se requiere una crema con base medicinal antiacné.
De acuerdo a las necesidades de la piel
Finalmente, también hay que comprender que es lo que necesita el rostro, ya que por ejemplo, áreas que sufren de resequedad requieren de una mascarilla hidratante. Estás necesidades son tan amplias como la lista de las imperfecciones, pero aún más difíciles de reconocer, pues a veces son imperceptibles.
En algunos casos hace falta un exfoliante, mientras que en otros un limpiador, un producto para la regeneración celular, un astringente o nutrientes como antioxidantes. Otra opción es adquirir un cosmético antiedad, cuya fórmula y composición abarca un espectro de requisitos tópicos más amplios.
Combinaciones ideales para brindar el mejor cuidado
Todos los ejemplos, opciones y recomendaciones ideales son solo la punta del iceberg, pues un usuario de cosmética con conocimientos más amplios sabrá que hay mucho más. El problema es que, como usuarios, tampoco hace falta ser expertos para aprovecharse de elementos cosméticos como la Mascarilla de carbón activo: qué es y cómo hacerla en casa
Aquí es cuando se debe tener en cuenta la armonía dentro del cuidado facial, ya que ciertas combinaciones funcionan mejor que otras, tanto dentro como fuera de la rutina. Este principio, por supuesto, también tiene una gran veracidad en el multimasking, así como en cualquier otro tratamiento.
Con el fin de que nadie se quede pensando que es demasiado difícil comprender cómo combinar dos o más mascarillas, se pueden dar algunos ejemplos claros. Sin embargo, de nuevo hay que recordar que no se trata de instrucciones precisas, por lo que cada persona debe elegir la opción que más convenga.
Según el tipo de piel
Para la dermis seca, que sufre de sensibilidad u vulnerabilidad a las imperfecciones, la mejor mezcla es una hidratante y otra antiedad, así como una para tratar las arrugas. La aplicación puede variar en cada rutina, utilizando una mascarilla en una zona durante el día y otra distinta en el ritual de belleza nocturno.
Del cutis mixto ya se habló anteriormente, pero cabe mencionar que el mismo tratamiento sirve para el tipo normal, solo que con menor concentración de activos. Para la piel grasa lo mejor es combinar limpiadores y reguladores con productos tonificantes y exfoliantes, utilizando recetas presentadas en Qué es y para qué sirve una mascarilla de arcilla blanca
Para situaciones particulares
Ampliando un poco más el abanico de posibilidades, hay que hablar de situaciones como padecimientos de acné, dermatitis u otras afecciones cutáneas. El hecho de que en una zona no se deban aplicar cosméticos, no significa que se deban omitir por completo, siempre y cuando se preste atención.
Lo mismo ocurre con imperfecciones localizadas, como ojeras, patas de gallo, bolsas en los ojos, códigos de barras, arrugas en el entrecejo o en las comisuras de nariz y labios. De hecho, uno de los procedimientos más comunes, durante el multimasking, es dejar el contorno de ojos para ser tratado aparte.
Si este es el caso, entonces se deben combinar las cremas y artículos estéticos, aplicándolos en las áreas libres de afecciones, con los ungüentos para cada ocasión. Sin embargo, esto solo si los medicamentos o cosméticos medicinales tienen contraindicaciones, que puedan ocasionar efectos secundarios.
Durante una rutina facial
La mezcla más adecuada para el día de hoy, puede no ser la apropiada para el día siguiente, la próxima semana o simplemente para la siguiente rutina de cuidado. Esta es una forma sutil de decir que no hace falta estancarse en una combinación de mascarillas, si notamos que hay que suplir muchas necesidades tópicas.
Muchas personas tienen una cantidad increíble de cosméticos en su mesa de noche, en un estante o en su neceser, aunque a veces parece que no son necesarios. Si es así, es una oportunidad para probar diferentes combinaciones, además de aplicar mezclas hechas en casa, como las presentadas en Las mejores recetas de mascarilla facial casera
Mascarillas dobles más recomendadas
Para las personas que buscan algunas recomendaciones, ya sea con la idea de probar el multimasking o simplemente por necesidad, también hay que tenerlas en cuenta. Si bien los ejemplos ayudan a tener claras muchas de las opciones, hace falta especificar más en la elaboración de las mezclas.
En otras palabras, para recurrir a la estética naturista hacen falta recetas, con medidas e instrucciones de preparación, pero más aún si se quieren combinar algunas. Como las posibilidades son tantas, vamos a mencionar solo algunas de las que, de acuerdo a la comunidad cosmética, son las más recomendadas.
Receta ideal para la piel mixta
La primera de las opciones es la base del concepto del tratamiento doble, ya que está dirigida a las personas que poseen un cutis con las características que lo hacen mixto. La primera mascarilla es para las áreas secas, como las mejillas, pómulos y el mentón, mientras que la segunda es para la zona T grasa.
Mezcla #1
- 2 cucharadas de yogurt natural.
- 1 cucharada de aceite de jojoba.
- 3 gotas de aceite esencial de argán.
Mezcla #2
- 2 cucharadas de miel de abejas sin procesar.
- 1 cucharada de aceite de coco.
- 3 gotas de extracto de manzanilla.
Esta receta no contiene partes líquidas y oleosas, ya que tanto el yogurt y el aceite de jojoba, como la miel y el óleo de coco, se mezclan entre si con bastante facilidad. Gracias a esto, solo hace falta preparar cada mascarilla en recipientes individuales, para luego aplicarlas en el momento o refrigerarlas durante un par de días.
Para tratar el exceso de sebo
La producción excesiva de sebo también es un ejemplo de un problema que se da por zonas, ya que en algunos puntos la limpieza rutinaria es una solución suficiente. En este caso, se busca reducir los comedones con la primera mezcla, mientras que la segunda está diseñada para regular el sebo y las impurezas.
Mezcla #1
- Media cápsula de carbón activado.
- 5 gramos de gelatina sin sabor.
- 2 gotas de glicerina vegetal.
Mezcla #2
- 2 cucharadas de yogurt natural.
- 1 cucharada de gel de aloe vera.
- 1 cucharada de aceite de aguacate.
Lo primero es disolver la gelatina en el agua, luego de calentar un poco esta última, para luego añadir el carbón activado y dejar que se enfríe, mientras se prepara la segunda mezcla. Esta última no requiere de un gran proceso de elaboración, pero en conjunto se trata de una combinación digna de estar entre Las mejores mascarillas caseras para los puntos negros
Mascarilla para regular la resequedad
Lo mismo que en el caso anterior, en ocasiones un rostro tipo seco tiene problemas de resequedad, pero no se da en la totalidad del mismo y no hay que tratarlo con intensidad. Para esta ocasión, la primera fórmula brinda una humectación más profunda, mientras que la segunda aporta emolientes para prevenir la resequedad.
Mezcla #1
- 2 cucharadas de gel de aloe vera.
- 1 cucharada de aceite de jojoba.
- 3 gotas de aceite esencial de rosa mosqueta.
Mezcla #2
- 2 cucharadas de miel de abejas.
- 1 cucharada de jugo de tomate.
- 1 cucharada de agua desmineralizada o purificada.
Es fácil reconocer los puntos atacados por la resequedad, ya que son sensibles al tacto, además de que la piel afectada se siente áspera, incluso un poco rústica. Aquí es donde se aplicará la primera fórmula, mientras que la segunda se deja para el resto del rostro, incluyendo el contorno de ojos.
Antiedad y cuidado facial todo en uno
Por último, una combinación ideal para los signos de la edad, en la que se unen una mascarilla antioxidante con otra ideal para estimular la producción de colágeno. Esta es más acorde con el cuidado general de la piel, por lo que se pueden cambiar las zonas de aplicación de cada fórmula en distintas rutinas faciales.
Mezcla #1
- 2 cucharadas de pepino machacado.
- 2 cucharadas de leche de almendras.
- Media cápsula de vitamina E.
Mezcla #2
- 2 cucharadas de papaya machacada.
- 1 cucharada de aceite de Oliva virgen.
- 3 gotas de aceite esencial de incienso.
Al igual que en los casos anteriores, no se requiere de un proceso complejo de elaboración, ya que las texturas de ambas mascarillas son bastante similares. La de papaya es mejor para los puntos que sufren por las arrugas, mientras que la de pepino nutre, hidrata y ayuda con la regeneración del tejido, como se explica en Todo lo que debes saber sobre la mascarilla de pepino